lunes, 31 de octubre de 2011

Viaje hacia la libertad

La impoténcia de sentirse culpable, le removía sus ser .El dolor de cada sentencia apagaba su llama, por eso, harto de ser cautivo de las opiniones se desprendió de todo  juez y palabrería barata falta de sentido.
Decidió emprender un viaje hacia su libertad, lejos de enemigos conocidos y notarios empedernidos. Sucumbió al encanto del cambio, para más tarde despertar i empezar a caminar.
Tiró por el retrete aquellas falsas espectativas que limitaban su alma, esperando ser como dice la canción: un perfecto imperfecto.
No buscaba la aprovación de aquellos espectadores que lo miraban con malos ojos, ni la aprobación de aquel cliché: "mantén los pies en el suelo".
Solamente buscaba aquella seguridad y confianza que amenazó con marchar hacía almenos tres años.